lunes, 2 de noviembre de 2015

[Desafío 30 días] Pregunta 2


Pregunta 2: Describe un local situado en una ciudad no muy grande medieval fantástica

Esta pequeña ciudad, que se considera a sí misma demasiado importante para llamarse pueblo, se encuentra situada en un lugar fronterizo, tránsito de aventureros que buscan fama y fortuna, y de los que vuelven, algunos con fama y fortuna, otros con las marcas de sus aventuras en el cuerpo, otros no regresan... Pero todos pasan por Highdell, dejando allí parte de la fortuna encontrada o de la que van a encontrar.

En el camino que lleva hacia la costa hay una mansión muy llamativa, llamada la Torre de Cantallama. Esta mansión, de considerable altura, tiene una planta circular y tres alturas. En el centro, una torre se eleva otras cuatro plantas, ofreciendo una vista inmejorable desde las alturas. Desde el punto más alto puede divisarse la costa, además de todos los alrededores.



En el pueblo existen rumores y leyendas sobre la Torre de Cantallama. La primera habla de su construcción, que fue erigida por un contrabandista. De esta manera, podría controlar al mismo tiempo el mar y la tierra, hacer señales a los barcos y poder determinar los mejores momentos para desembarcar las mercancías. Otras personas cuentan que la Torre fue construida por un poderoso hechicero que estaba convencido de que en ese lugar había un nexo de poder, una confluencia de tierra, mar y aire que permitía una gran magia elemental.

La Torre ha permanecido cerrada durante los últimos 50 años, hasta que un comerciante local llamado Rhauntides la compró como base de operaciones. Desoyendo todos los consejos y advertencias, e incluso las leyendas de que la Torre estaba encantada, montó allí su puesto comercial. Las malas lenguas hablan de que su hija, Nicole, no está bien de la cabeza, y que de esta manera tiene un lugar donde mantenerla a salvo.

Y no parece irle mal a Rhauntides. Su negocio ha prosperado. Su hija Nicole ha sido vista paseando por Highdell (siempre acompañada) y parece encontrarse bien de salud, aunque de pensamiento un poco errático. Pero algo raro le pasa a Rhauntides. En lugar de estar contento, está algo deprimido, preocupado.

Y es que Rhauntides ha descubierto la verdad: la Torre de Cantallama está encantada. El hijo del anterior propietario fue asesinado por su malvada madrastra, y maldito por ella. El fantasma hacía huir a todos los que se acercaban a la Torre, asustándolos. Hasta que llegó Rhauntides.

Porque la joven Nicole, que nunca ha estado bien de la cabeza, se ha enamorado del trágico fantasma. Y lo que es más extraño, el fantasma se ha enamorado de ella. Y Rhauntides no sabe cómo solucionar este problema. Si intenta alejar a Nicole de la Torre de Cantallama, el fantasma se lo hará pagar. Y, si el fantasma está contento, sus negocios prosperan. Quizás si Nicole se enamorada de otra persona...

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